VOTOS DE ESTE DOMINGO
POR: MARIANA JARAMILLO FONSECA
Lo primero que quiero decir de nuevo como en columnas anteriores es que es importante votar. Luego paso a decir que tengo clarísimo qué escribo pero pienso que quienes tienen problemas con lo que escribo, son los lectores que parecen no fijarse bien en lo que digo. El domingo salí a votar sin ninguna esperanza, solo queriendo ejercer mi derecho y siendo fiel a mis convicciones y deseos como ciudadana.
Durante 2 períodos seguidos voté por el mismo candidato y esta vez me quise arriesgar a otra alternativa. Tenía varias razones para querer probar otros rumbos políticos y quiero detenerme aquí a explicar esas razones, porque creo que pueden ser interesantes. Una de ellas se refiere a que me cansé de los candidatos que solo critican. Si bien la oposición es parte importante de la democracia, no es la única labor que tiene un senador y no es esa la única razón por la que los ciudadanos eligen a alguien. Me cansé de candidatos para quienes se convirtió en una excusa ser minoría en las bancadas del senado. Una de las habilidades que debe tener un senador, si su idea va más allá de criticar sin proponer, una postura por demás cómoda, es la de negociar (en el más limpio de los sentidos) con otras tendencias políticas a favor de sacar adelante proyectos de ley que favorezcan a los ciudadanos que los eligieron. Así que me parece vergonzoso que existan senadores y sectores políticos que se escuden en ser minoría, para no hacer la parte más importante de su tarea que consiste en presentar proyectos de ley posibles e importantes para los ciudadanos. Los sectores que tanto han criticado las condiciones laborales o la misma ley 100, han sido incapaces de hacer una reforma que integre el sector de la salud y el laboral para lograr mejores condiciones para los colombianos. Me cansé de que quieran pintar que todo es imposible y que en el senado no se puede hacer nada. Eso no me lo creo.
Me imagino que la tarea de ser senador no debe ser fácil, por algo se ganan 21 millones de pesos que nosotros les pagamos con nuestros impuestos. Lo mínimo sería que uno como elector, viera que a quienes les dio el voto se esfuerzan por, además de criticar, hacer algo a favor de quienes lo necesitan. A quienes tiene que rendir cuentas un senador de la república no es solo a sus colegas sino, de manera fundamental, a quienes lo eligieron, porque es a favor de ellos que debe legislar, es a ellos a quienes debe su lugar en esa corporación. Así que este domingo, aunque creo que mi voto a senado no rendirá fruto, quedo con la conciencia tranquila de no apoyar solo a los honestos, bien argumentados, pero nada propositivos.
LA ÑAPA: Quedó el país en manos de los godos. Los liberales menguados y ni que decir del Polo. Conclusión: un senado diabólico.
PSICÓLOGA PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA
MAGISTER LITERATURA HISPANOAMERICANA INSTITUTO CARO Y CUERVO
Columna publicada hoy miércoles 17 de Marzo en el diario El Nuevo Día de Ibagué
1 comentario:
Si bien uno debe votar por quien le haya vendido mejor su campaña, o en su defecto, por la persona que conoce como menos corrupta, no creo que siempre "votar por el que sé que no va a ganar, pero me gusta" sea lo apropiado. Me explico, independientemente de que mi candidata predilecta de la consulta conservadora, haya sido Martha Lucía Ramirez, no puedo obviar el hecho de que si no votaba por Noemí (pensando que mi voto sí cuenta), don "Uribito me lavo las manos de mis sinverguencerías con dos sonrisas y haciendo que mi hija mande besos a las cámaras" Arias, hubiera ganado. Algunas veces hay que unirse contra un enemigo común.
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