Si señoras, por fin la revista cultural de la Casa editorial Semana, que asegura su directora, no es de nicho, está en la red. Digo por fin porque ya era hora. Además, porque hay que reconocer que en muchas oportunidades las revista trae información valiosa sobre libros, eventos culturales diversos, y pone a escribir a gente que lo hace bien y a veces, logra ser divertida.
Ya era hora que la revista entrara en la onda virtual, saliera de su cárcel de papel y se pusiera al alcance de lectores que ya poco leen en papel, a quienes no les interesa colaborar con el calentamiento climático, o a quienes no tienen para pagar la suscripción.
Creo que el hecho que solo hasta ahora Arcadia pusiera su contenido en la red, obedece a lo retrógado de su directora, a quien escuché en un conversatorio en el Hay Festival del 2009, en una mesa de discusión al lado de Andrés Hoyos y un a libanesa de apellido Haddad, que lo cibernético no era fundamental y que aún el papel seguiría siendo el rey. Gracias a Dios en la Casa Editorial Semana conciben las cosas de otra forma y entienden que en la red se mueve muchísima gente y es necesaria la presencia de los medios en ella.
Sobre la página de Arcadia en concreto, debo decir que es amigable, clara, que tiene el contenido de la revista que en esta oportunidad, como en otras está muy interesante, pero le falta color, más espacio para los lectores, le falta más movimiento, pero todo eso se ganará con el tiempo, y en la medida en que la interacción con los lectores se consolide. Así que suerte a Arcadia y AQUÍ queda su página
Ya era hora que la revista entrara en la onda virtual, saliera de su cárcel de papel y se pusiera al alcance de lectores que ya poco leen en papel, a quienes no les interesa colaborar con el calentamiento climático, o a quienes no tienen para pagar la suscripción.
Creo que el hecho que solo hasta ahora Arcadia pusiera su contenido en la red, obedece a lo retrógado de su directora, a quien escuché en un conversatorio en el Hay Festival del 2009, en una mesa de discusión al lado de Andrés Hoyos y un a libanesa de apellido Haddad, que lo cibernético no era fundamental y que aún el papel seguiría siendo el rey. Gracias a Dios en la Casa Editorial Semana conciben las cosas de otra forma y entienden que en la red se mueve muchísima gente y es necesaria la presencia de los medios en ella.
Sobre la página de Arcadia en concreto, debo decir que es amigable, clara, que tiene el contenido de la revista que en esta oportunidad, como en otras está muy interesante, pero le falta color, más espacio para los lectores, le falta más movimiento, pero todo eso se ganará con el tiempo, y en la medida en que la interacción con los lectores se consolide. Así que suerte a Arcadia y AQUÍ queda su página
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